«…Vivimos momentos inéditos en nuestras existencias monótonas, siempre tendentes a la expansión. Estandartes como Detroit, capital del automóvil que ridiculizó el viaje convertido en frenético desplazamiento, entran en bancarrota irreversible. Escapar, como acostumbrábamos, es imposible. Se agotó hasta el refugio de la deuda pagada con deuda, vista la porquería que arrastraba este plumero…»
Nacido en la cosecha del 77 en Barcelona, con estudios elementales de economía y lecturas de todas las disciplinas, trabajador de banca a ratos mañaneros y escritor novel con ganas de interactuar con la naturaleza en el único trabajo que dignifica al hombre según Cicerón: el de agricultor. Hoy entrevistamos a Daniel Pueyo Pedret, autor de Verdades como pueblos, un ensayo editado por ediciones Carena que no deja indiferente a nadie por su lucidez, sentido del humor y lecciones prácticas y teóricas sobre la realidad que nos rodea en estos años que nos ha tocado vivir.
CCM-Lo prometido es deuda: La deuda se paga o se sigue debiendo. No se bebe ni se fuma aunque sea altamente tóxica… Así empieza tu libro, toda una declaración de intenciones.
DP-Así acabará la historia de esta civilización. Con una deuda financiera disparada y la posibilidad de pagarla o no En las triquiñuelas para pagarla de verdad podremos distinguir si damos un salto evolutivo al siguiente estadio o nos vamos al garete.
CCM- ¿Pesimista u optimista en este aspecto?
DP-Si alguien relata un problema es porque se quiere enfrentar a él y en primer lugar relacionándose. Convencido de que alguna de las infinitas soluciones en nuestro poder o caídas del cielo nos sacarán del atolladero.
CCM- Atolladero en el que parece nos hemos metido solos, aunque se intente decir que hemos sido empujados por fuerzas del «exterior» ¿Cómo lo definirías?
DP-Tendemos a echar las culpas de todo al exterior, pero siempre es el interior el que genera las interferencias primarias que desencadenan todas las demás. La deuda es muy expresiva de la situación. Cada estado se endeudó porque sus ciudadanos quisieron y cada ciudadano porque soberanamente lo decidió.
CCM-En ese sentido hablas en tu libro sobre los administradores del estado, en concreto manifiestas que estos no producen, sino que gestionan parte de la producción ¿Crees que la sociedad esto lo entiende, o se limita a hacer oídos sordos y la vista gorda esperando que los gestores les solucionen las papeletas?
CP-No producen ni los administradores de los estados ni de las empresas. Ni los vende-votos, ni los vende-productos. Haciendo el tonto hemos llegado a una situación en la que aproximadamente el 90% de la población no produce y subiendo.
CCM- ¿Qué cambiarías entonces en España para que se revertiese la situación?
DP-Formas organizativas implicativas de responsabilidad. Por ejemplo voto a mano alzada en cuestión política. Propietariado en lugar de asalariado. En resumen, quien no se puede responsabilizar no puede administrar ni producir. La tendencia es al parón de esta manera.
CCM- Entiendo. Supongo que por ello escribes en el libro que la prometida reforma de las administraciones públicas, sin retocar mínimamente la idiosincrasia de las mismas, produce un efecto similar a la pérdida de peso en un organismo enfermo, pero ¿Cómo cambiar para que de verdad se note que algo ha cambiado?
DP- La reforma de las Administraciones Públicas y concretamente la Administración Local, consiste en suprimir aquellos cargos que menos cobran y que menos gastos ocasionan en coches oficiales y hoteles. Son los Europarlamentarios los obligados a profesionalizarse y a coger muchos aviones cada mes. Los concejales van andando a sus puestos. Un cambio sin que se note podría suponer dar importancia al ayuntamiento que ya lo tenemos en cabeza de más de 8000 municipios.
CCM-O sea, regresar un poco a las relaciones de vecindad en vez de dejarlo todo en manos de organismos gigantescos muy alejados de los individuos.
DP-Los Vascos se organizaban alrededor de un árbol. Los Andorranos modernos alrededor de una parroquia. Tanto da el lugar. Lo importante es que lo público se decida en público y lo privado entre las partes implicadas. La tecnología dirá el resto sobre el lugar y la manera.
CCM- Eso parece que quieren hacer de alguna manera tus paisanos catalanes, o al menos una parte importante de ellos ¿Cómo vives tú el proceso separatista iniciado por Más?
DP- Eso es lo que jamás hará Artur Mas porque consistiría en reunir al pueblo implicado y pronunciarse. Soy de los que vive como hecho normal que la ciudadanía se quiera independizar de España y pronostico que el día de mañana lo querrá hacer también de Cataluña. Porque lo que realmente se siente ahogar son las estructuras organizativas actuales.
CCM- Ya, pero se tendrá que dar un paso en contra de todo eso, alguien tendrá que darlo, pero en el libro comentas que en el mismo instante que el individuo acciona una palanca donde se escribe la palabra cambio , una serie de transformaciones se suceden sin que se puedan predecir las consecuencias ¿el poder omnipotente que todo lo vigila es el enemigo del cambio?
DP- El poder omnipotente somos cada uno de nosotros y relacionados con los demás poderes es difícil adivinar las consecuencias. Nuestra esencia nos lleva a no querer cambiar, por pura comodidad y miedo a meternos en terreno desconocido. Pese a todo el cambio de condiciones ambientales nos empujará a querer cambiar, porque la situación se va volviendo irresistible.
CCM- ¿No sería mejor olvidarse de un progreso a lo cangrejo y regresar a lo rural? Al fin de cuentas, España tiene a su entorno rural despoblado pero aún con recursos para un cierto cambio de tendencia.
DP- Sería conveniente generar todos los materiales necesarios para la industria desde el sector primario agrícola. Carbón vegetal en lugar de mineral o lino en lugar de fibras sintéticas. A lo rural hay que regresar, pero con procedimientos mucho más avanzados que los de nuestros abuelos porque más de 40 millones de habitantes no se mantienen así como así. La biotecnología puede dar respuestas, pero también dar continuidad a lo olvidado tras la revolución verde. Y sin ninguna duda la industria ganaría potencial productivo diseminada por el campo. El cambio de esta era debería ser ese.
CCM-De todo esto trata tu ensayo, un libro que dice «verdades como pueblos», pero que supongo al ser un escritor novel te costaría mucho que las editoriales se interesasen por él, ¿Cómo ha sido el proceso de búsqueda y encuentro de una editorial que apostase por tu libro?
DP- Parece difícil, pero con la constancia de enviar la propuesta a unas diez editoriales por semana iba logrando el interés de alguna de ellas cada mes. Y entre las que lo hicieron Ediciones Carena fue la que me pareció más íntegra para realizar una de las últimas tareas de la obra.
CCM- Y de vivir de ello de momento no hablamos.
DP- Estoy viviendo con ello muy a gusto. Vivir he vivido siempre y viviré con o sin ello.
CCM- Una estupenda sentencia para ir cerrando esta entrevista, pero aún me queda algo en el tintero ¿Cómo ves las próximas elecciones europeas?
DP- Como elector votando al partido X. Como observador con un PP-PSOE que va a rozar en conjunto el 50% de papeletas. IU y UPYD con aproximadamente 15 y 10% de apoyos. CIU y ERC en conjunto tienen que sumar un 5%. El restante 20% se va a repartir entre formaciones novedosas representativamente y votos nulos y en blanco que pueden llegar a sumar un 7%.
CCM- O sea, como siempre…
DP- Quizás indiquen que las elecciones nacionales se tienen que anticipar a las municipales
CCM- ¿Y tú próximo libro, para cuando nos lo anticipas?
DP- Escribir, como ejercicio es tan sano como jugar al ajedrez y voy a continuar practicando ambas distracciones. Hacerlo en forma de libro, artículo o carta al director de un periódico ya es otra cosa.
CCM- Pues ya sabes que esta es tu casa y cuando quieras nos puedes dejar algún artículo, Daniel. Y ya me despido de ti, recordando además porque es de justicia, que el prólogo de tu libro lo ha escrito otro buen amigo y mejor escritor como es Ramiro Pinto Cañón. Qué decir de él, tú que lo conoces más que yo.
DP- De él recomendar la lectura de «los fundamentos de la renta básica y la Perestroika del capitalismo». Allí explica esta crisis muchos años antes de que empezáramos a crecer económicamente. Una persona así sólo podía escribir el mejor de los prólogos que se pudieran haber escrito.
CCM- Pues nos quedamos con la recomendación y procuraremos invitarlo a estas páginas virtuales. Un placer amigo, y mis felicitaciones por el libro, y a la editorial por el acierto sin duda en publicarlo.
DP- Gracias y suerte con la actividad editorial de publicaciones más escuetas y fugaces por los mundos internautas. Que lo efímero nos eternice.
Entrevista realizada por Gallego Rey @mareaxenaterra Todos los derechos reservados Publicada en Costa cálida Magazine